MALDITO AYUNTAMIENTO

Uno de los regalitos que me han traído los reyes magos de correos de mi pueblo, la comparación es substeptible ya que aquí sólo dan el cayo un día al año, me llega una multa. Para más detalle se trata de una infracción de velocidad y fue detectada el día de la purísima.
Estaba desayunando y me tomo mi cacao con cereales. Tranquilamente la leo y pienso que tengo días para pagarla. Bien aquí empieza a escocer la úlcera. No encuentro la puta fecha límite para pagar la mitad del coste de la multa. En la mierda de papel no pone ningún concepto de nada. Casi a pasado un mes y no encuentro la maldita fecha límite. Miro por tercera vez todas las palabras del informe y veo mirar en el dorso. ¿Cómo que mirar en el dorso? ¡Ponme la puta fecha!
Resignada miro el dorso. En el antepenúltimo párrafo de la parrafada en letra minúscula con mil referéncias a las leyes del decreto del mismisimo pillaje, me dice que tengo 20 días naturales, la denominación de hábiles no persiste en el comunicado para nuestra agradable confusión, para presentar alegaciones ante el ayunatmiento y si en ese periodo no ha habido tal susceso es que el procedimiento se efectuará sin reducciones del coste. Y la duda me llegó ¿a cúal fecha se refiere a la cámara o a la de la coacción? Si, amigos habéis leído correctamente, co-acción, ¿qué coño es eso?
Me pongo nerviosa, sin haber tomado café, menos mal. Los del ayuntamiento de Barcelona han tenido suerte, porque huebiera ido toda loca ante ellos con mi coche, la multa en mano, una escoba y la bata de chachaminga a pedirles explicaciones porqué me manda una multa con tanto retraso. Suerte que el cacao, en polvo 100% natural, sólo despierta la imaginación.
Malhumorada me pongo delante del ordenador y me dispongo a pagar la multa, ya que antes había contado los días naturales que había desde la fecha primera, la de la purísima, y adivina hoy era el último día natural. Qué gran efectivo este de recaudar dinero con multitas a última hora. Fresquitas como el besugo de fin de año o de nochebuena. Este ultraje barcelonesque me tenie un tanto hartita ya. Pero ¡ja! A ver si van a llegar más como esta ... y he tenido suerte que no estaba trabajando.